¿Qué es un activo fijo?

Un activo fijo se define como un activo que permite a una empresa generar un beneficio para la misma. Los activos fijos son activos físicos, intangibles o financieros que una empresa posee y desea utilizar durante más de un año. En el balance, el inmovilizado se incluye en el activo no corriente.

¿Qué es la gestión de activos fijos?

La gestión de activos fijos es un método contable cuyo objetivo es controlar el ciclo de vida de los activos fijos y optimizar la contabilidad de la empresa. La gestión de activos fijos permite a las empresas:

• Realizar un seguimiento de los activos fijos,
• Reducir los costos de mantenimiento,
• Mejorar la eficiencia operativa, etc.

¿Cuáles son los diferentes tipos de activos fijos?

Activos fijos tangibles

Un activo fijo tangible es un activo físico que la empresa pretende utilizar durante varios ejercicios contables. Este activo puede ser utilizado en la producción, alquilado a terceros o para la gestión interna de la empresa. Ejemplos de esto incluyen terrenos, vehículos, muebles, equipos informáticos, etc.

Activos fijos intangibles

Un activo fijo intangible es un activo que no es físico ni monetario. Ejemplos de esto incluyen patentes, licencias, marcas, sitios web, fondo de comercio, etc.

Activos financieros

Los activos financieros se encuentran en las cuentas de la clase 26 y 27, que son los activos monetarios de una empresa. Esto incluye títulos inmovilizados, préstamos otorgados por la empresa a terceros, etc.

¿Cómo gestiona la contabilidad la amortización de los activos fijos?

Cuando una empresa adquiere activos fijos, se amortizan contablemente a lo largo de varios ejercicios mediante un plan de amortización. Pueden amortizarse de tres formas diferentes.

Amortización lineal

Un plan de amortización lineal permite distribuir el valor financiero del activo de manera uniforme. Las anualidades serán constantes y no variarán independientemente de la duración de la amortización.

Amortización acelerada

Un plan de amortización acelerada permite que las anualidades disminuyan de manera decreciente. Este método no se puede aplicar a vehículos de turismo y a bienes que tengan una vida útil inferior a 3 años.

Amortización excepcional

Un plan de amortización excepcional permite amortizar fiscalmente de manera acelerada ciertos activos. Este tipo de amortización no existe en contabilidad, ya que constituye dispositivos fiscales. La duración de la amortización excepcional varía de 12 a 24 meses. La empresa obtiene un beneficio fiscal en los primeros meses, que luego debe reintegrar en los años siguientes.